lunes, 12 de enero de 2009

QUE NOS DEN POR EL CLUEDO

Poema del libro "Infierno Sostenido" publicado por El Gaviero Ediciones en la colección Guairo.

El mundo está del revés
y las costuras me rozan la piel.
Estoy jugando en la cocina
y entre mis manos tengo una llave inglesa,
he de cometer un crimen:
escribir un poema.

No sé si tendré castigo
y eso me angustia, Dostoievski diría que sí,
pero...
¿A quién le importa si hay castigo?
¿A quién le importa Fiodor Mijailovich?

Sé que tengo que escribir
y matar al doctor Lemon,
desde el baño lo veo más claro,
los demás no piensan,
han matado demasiadas veces.

Estoy en la habitación del doctor
con el Marqués de Marina y el señor Pizarro,
ahora se llaman el coronel Mustard
y el reverendo Green, lo anglosajón
nos ha comido los sueños, pero está claro
que habiendo un crimen, la sangre azul,
las estrellas con puntas y la iglesia
siempre están en medio.
Imposible ganar, yo nunca he matado.
Este poema puede ser un rapto de locura,
leo el Crimen de Cuenca
de mi amiga Salvador Maldonado,
en la tele ponen Crimen Perfecto,
me duelen las entrañas de ver asesinados.

Game over, el juego ha terminado,
hay sangre en el pasillo,
los políticos huyen de la casa,
cierro los ojos al doctor Lemon,
no rezo porque no sé y me escuece,
la casa está vacía como el mundo,
recojo las fichas y acabo el poema,
poema inconcluso con un millar de costuras,
pero no puedo irme sin cometer mi crimen:
un niño palestino muere en Israel
y yo miro hacia otro lado.
Que nos den a todos por el Cluedo.

3 comentarios:

el lector dijo...

Pues sí, si no fuera porque somos aficionados a esto de vivir, nos darían igual el Cluedo y las razones.

Tío, escuchando bossa nova q habla de meninas y de amores, aunque sea martes y 13. Un abrazo.

Marisa Peña dijo...

El final es genial, directo, ácido...Muy bueno el poema Oscar, para estos tiempos de cínicos trajeados que deciden la vida y la muerte en sus despachos. Un abrazo

Unknown dijo...

Recuerdo este poema.
Me gusta mucho.
Besos primo