Los domingos despertaban
con la voz de un hombre:
¡Chatarrero! ¡Chatarrero!
No sabía, entonces,
que hablaba de los huesos,
de la piel que se abandona,
no sabía nada
de ese augurio,
grito profético anunciando
que la vida se va
dejando un protector de dudas
y un vehículo para el desguace.
Óscar Santos Payán , Desguace, (Banderines del Zaguán , 2009)
sábado, 17 de agosto de 2013
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3 comentarios:
En el más hondo y auténtico conocimiento, nunca sabemos nada, y quizá sea mejor así.
Espléndido, me parece.
ABrazos
Hora tras hora, día tras día,
entre el cielo y la tierra que quedan
eternos vigía,
como torrente que se despeña
pasa la vida.
Devolvedle a la flor su perfume
después de marchita;
de las ondas que besan la playa
y que una tras otra besándola expiran,
recoged los rumores, las quejas,
y en planchas de bronce grabad su armonía.
Tiempos que fueron llantos y risas,
negros tormentos, dulces mentiras,
¡ay!, ¿en dónde su rastro dejaron,
en dónde, alma mía?
Rosalía de Castro, Tiempos que fueron.
...aunque parafraseando a Edna Moda (Los Increíbles 2004), no hay que mirar el pasado, distrae del presente.
Un saludo.
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